El masaje tántrico es una creación del neo-tantra que no deriva de las enseñanzas tántricas originales. Sin embargo se basa en los fundamentos y leyes ancestrales del Tantra y el control de la energía.
Es una experiencia holística de naturaleza terapéutica de todo el cuerpo que puede amplificar y gestionar la energía sexual y la consciencia. El masaje utiliza diversas técnicas que activan la energía sexual y pueden ayudar a liberar bloqueos y traumas, que pueden impedir al hombre experimentar un placer sexual profundo, orgasmos múltiples, capacidad de canalizar y mover su energía como la de su pareja. A través de puntos de presión específicos, el hombre puede experimentar efectos espirituales y energéticos extraordinarios.
Este masaje se realiza con una actitud de amor incondicional y devoción, honrando la naturaleza del propio ser.
¿Cómo se manifiestan los bloqueos?
Los bloqueos pueden manifestarse de manera física, mental, emocional y sexual. Sin embargo, su origen es siempre energético y se altera mucho antes de que se manifieste como algo más tangible y concreto. Estos bloqueos pueden aparecer como problemas de salud comunes, depresión, emociones excesivas, inestabilidad mental, falta de confianza, miedo a la intimidad, bloqueo en el corazón, insensibilidad, hipersensibilidad o dificultades sexuales como:
• eyaculación precoz
• disfunción eréctil
• impotencia
• adicción a la pornografía
• sentimiento de culpa al masturbarse
• adicción a la masturbación
• falta de deseo
• falta de orgasmos
• falta de lubricación
A través de una poderosa canalización de energía, el masaje tántrico puede remediar estos bloqueos. Es el aspecto energético que permite la transformación a todos los niveles.
El masaje Lingam
En Tantra, al pene se le nombra Lingam, que significa «vara de luz» en el lenguaje sánscrito. El masaje tántrico es un masaje de todo el cuerpo, de pies a cabeza, incluyendo el lingam, los testiculos, el perineo y en caso de una sanación sexual, también el punto sagrado masculino, que se encuentra en la próstata.
La diferencia entre un masaje tántrico y un masaje erótico radica en qué el erótico, es un masaje sensual con una finalidad sexual y placentera, mientras que el masaje tántrico, trabaja el desarrollo personal, la expansión de la consciencia y la espiritualidad.
Durante el masaje tántrico, se despierta la energía sexual por todo el sistema nervioso, armonizando los chakras y purificando los canales energéticos de todo el cuerpo. Su finalidad es la de conectar la sexualidad con el amor, desbloquear el punto sagrado, ascender la energía Kundalini y aprender a sublimar esta energía y por ende, contener la eyaculación. Es decir, que un masaje tántrico no tiene fines sexuales satisfaciendo una necesidad lasciva. El orgasmo no es el objetivo, aunque tampoco lo excluye.
Los genitales del hombre y de la mujer son órganos poderosos y depósitos de energía. En estos, también residen el estrés, bloqueos, emociones y heridas estancadas. Precisamente por este motivo, es de extrema importancia incluir los órganos genitales en el masaje.
El taoista Mantak Chia indica en su libro “Reflexología Sexual”, que los órganos sexuales son los puntos reflejos más importantes del cuerpo y que, cuando se estimulan adecuadamente pueden tener un poderoso efecto curativo en los sentidos y en los órganos internos, aportando salud y bienestar.
Desafortunadamente hoy en día, el masaje de los genitales se malinterpreta, ya bien sea por creencias, desinformación o ignorancia, olvidando que el tantra sirve de expansión de consciencia.
¿Qué ocurre durante un masaje tántrico?
Una sesión de masaje tántrico tiene una duración prolongada de tiempo para llevar a la persona a un estado de calma mental y corporal. En este proceso, el sistema nervioso parasimpático puede activarse y desencadenar efectos curativos. Además, de esta manera la persona está más abierta a recibir y se establece una confianza que permite apertura y liberación de bloqueos reprimidos.
Un ingrediente esencial del masaje tántrico es la respiración consciente. La respiración nos ancla al cuerpo, ayuda a expandir la energía que se está movilizando en nuestro interior y nos mece cómo las olas del mar, creando estados de relajación profunda. Nos lleva a estar totalmente presentes y conscientes.
Antes de iniciar el masaje tántrico, vestidos con pareo, se comienza con un ritual de conexión y veneración que puede incluir respiraciones, movimientos, canto de mantras, mudras o acaricias conscientes. También se pueden repetir las intenciones expresadas en una charla previa para manifestar de una manera potente los resultados deseados. Después de un tiempo, se invita al recibidor a tumbarse sin pareo en un futón y comienzan una serie de técnicas de masaje aplicando presión en puntos claves de energía para lograr un estado de relajación y rendición. El masaje comienza primero por las partes menos íntimas del cuerpo abriendo canales de energía. Una zona importante es el chakra del corazón. Aquí muchos hombres acumulan bloqueos.
Una vez preparado energéticamente, se avanza hacia el masaje del Lingam. El Lingam no es solo un órgano físico para el placer o la procreación. Es un pilar físico, energético y simbólico de poder, así como un depósito de energía excepcional. Dispersando esta energía por todo el cuerpo permite despejar obstrucciones.
En un autentico masaje de Lingam, la meta no es el orgasmo eyaculatorio, que es lo contrario a los principios tántricos antiguos. Sin embargo, la energía sexual se contiene, se mantiene y se expande por todo el cuerpo. Se trata de poner riendas a la energía vital y no liberarla. Con esta acción se consigue el orgasmo energético de cuerpo completo para un hombre.
La liberación del semen aleja al hombre del placer profundo, satisfactorio y duradero, así como orgasmos múltiples y le deja sin energía (perdida de Ojas = perdida de fluidos vitales).
El masaje concluye con una relajación final para integrar todas las energías activadas y experiencias vividas. La experiencia es diferente para cada persona pero en general, se siente energetizado, armonizado y con una sensación general de bienestar profundo.
Los efectos y sus beneficios
Con su enfoque en despertar, activar y sublimar energía poderosa a través del tacto especializado, el masaje puede traer resultados y efectos significativos para un hombre. Se pueden experimentar los siguientes efectos y beneficios:
• Relajación, vitalidad y rejuvenecimiento de todo el cuerpo.
• Libera tensiones producidas.
• Alivio de bloqueos y resolución de dificultades sexuales.
• Sanación de dolencias.
• Sensibiliza los genitales masculinos.
• Dispersión y control de la energía por todo el ser.
• Un aumento en la conciencia sexual y el potencial orgásmico.
• Establece una vía de comunicación entre la mente y el cuerpo.
• Mejora la circulación y genera energía positiva.
• Liberación de la potente energía sexual almacenada y atascada.
• Despertar del corazón.
• Activación de todos los chakras.
• Equilibrio de problemas de hipersensibilidad e hiposensibilidad.
• Activación del potencial de la experiencia del orgasmo energético del cuerpo completo.
En fin, es una experiencia maravillosa, inspiradora y muy beneficiosa.
